La interesante propuesta de B+Safe para los sistemas de control de acceso es, sin duda, una muestra más de que también en las situaciones difíciles se puede ser creativo y detectar oportunidades. Y es que en tiempos en los que el coronavirus está cambiando tantos aspectos de nuestra vida diaria, todo ejercicio de adaptación a esta nueva realidad, si trae de la mano soluciones para hacerla más sencilla, son muy de agradecer en mi opinión. Y es por eso que encuentro tan interesante esta propuesta.
Lo cierto es que, a día de hoy, no sabemos si las mascarillas nos acompañarán un mes, un año o más. Esta circunstancia, claro, afecta de manera crucial a los sistemas de control de acceso que emplean la identificación facial para tal fin, y aquí se encuentra el punto más destacable de la propuesta de B+Safe, ya que han desarrollado un sistema de identificación biométrica que es capaz de identificar a los usuarios tanto si están empleando una mascarilla como en caso de que no sea así.
MS Recomienda
Además, y en aras de la seguridad de los espacios protegidos con el sistema, éste puede ser configurado para que solo se permita el acceso a las personas que portan este sistema de protección, impidiendo el acceso de usuarios sin mascarilla, aún cuando sean personas que sí que cuentan con autorización para franquear el acceso. Algo que quizá estos días no sea necesario, pero que pasados unos meses, y con la tendencia del ser humano a volverse laxo con el tiempo, puede ser una medida de seguridad de lo más eficaz.
Por otra parte, pensando también en preservar la seguridad del espacio custodiado por el sistema, la propuesta de B+Safe incorpora también sensores térmicos, con los que es posible medir la temperatura corporal de la persona que desea acceder. A este respecto es posible determinar un rango de temperaturas «aceptables», e impedir el acceso a aquellas personas que no se encuentren dentro del rango térmico autorizado. Ya sabemos que la fiebre es uno de los principales indicadores de presencia del coronavirus, y que las autoridades de muchos países se rigen por este indicador para aplicar sus medidas de seguridad, por lo que incorporarla al control de accesos puede aportar mucha seguridad.
Además, y para otras condiciones, también incorpora lector de palma de la mano, un sistema que, pese a que en estos tiempos no parece lo más recomendable, sí que volverá a tener sentido en el momento en el que, gracias a las vacunaciones masivas (bendita ciencia, una vez más dependemos de ti), lleguemos a ser inmunes frente al patógeno. Dicho de otra manera: puede que hoy no resulte especialmente útil, pero es probable que sí lo sea más adelante, por lo que contar con esta función hace que la propuesta de B+Safe sea muy útil tanto en el presente como en ese futuro que todos esperamos.
Fuente:https://www.muyseguridad.net
